8 de mayo de 2010
Comenzamos a participar en el proyecto Ibaialde en 2004, parece poco tiempo, sin embargo, Carlos lleva de la mano a Aimar, que aún no había nacido y los niños son los protagonistas de esta salida.
La mecánica es sencilla: mañanera, paseo por el monte hasta Landarbaso, medida de los parámetros del regato del mismo nombre en tres puntos de sus cauce y tortillita en alguno de los merenderos de la zona.
En fila india caminados por el precioso bosquecillo que jalona el regato.
Medimos, comprobamos y anotamos.
Posamos y, como siempre, lo pasamos bien.
Si quieres ver más fotos no dejes de visitar el álbum de flickr.