Arcachon-Hermanamiento con C2A

7 y 8 de octubre de 2006

Arcachon-Hermanamiento con C2A

Se produjo el viaje de hermanamiento, esta vez fuimos nosostros a tierras boredelesas a devolver una visita que casi habíamos olvidado, habíamos dejado pasar demasiado tiempo. 

De camino a nuestro destino hicimos una breve pero nutritiva parada para desayunar y calentar los cuerpos.
El Comité de Bienvenida de C2A nos esperaba poco antes de llegar a Arcachon. Besos, abrazos y buenos deseos.
Nos encaminamos hacia la primera sorpresa: el Aquarium/Museo de Arcachon, uno de esos lugares que mantienen el ambiente de los museos a la antigua, un pequeño tesoro que va a desaparecer en 2007 y que es, además, el más viejo aquarium de Europa.

De izquierda a derecha y de arriba a abajo:

Jean Maurice, Janine, Cyril, Lourdes, Yolanda, Luis, Víctor, Samuel, Fred, Philippe, Ernesto, Eneko, Marie Thérése, Héctor, Carlos, Nicolás y su esposa.

La bióloga del Aquarium de Arcachon, Christelle, nos mostró las instalaciones desde dentro. Nos contó cómo filtran el agua de los tanques, cómo la calientan, con qué especies cuentan y un sinfín de datos que nos acercaron más a este maravilloso rinconcito de vida.

Tras la visita, recorrimos el paseo que discurre paralelo a la costa: estábamos como en casa.
Tras una opípara comida, nos fuimos a contemplar y a caminar sobre una de las atracciones más características de Arcachon y su bahía: la Duna de Pilatos, la más alta de Europa.
Lo más increible es encaramarse a los ciento y pico metros de altura que tiene y asomarse a un bosque landés que lo cubre todo, te das la vuelta y el mar golpea la costa a tus pies.
Siguiente sorpresa, y esta fue de campeonato, sin desmerecer las otras, nos acercamos a una especie de Casa de Cultura para jóvenes en la que un caballero llamado Christian Champfort mantiene, para regocijo de nuestros ojos, un pequeño aquarium digno de visita y que os recomendamos vivamente desde estas líneas.
Christian nos muestra desde un paludario con tortugas, pasando por otro de agua salobre con peces cuatro ojos y arqueros, hasta un tanque con corales o uno que semeja una gruta y está habitado por esos carácidos que han perdido la vista a fuerza de vivir en la más absoluta obscuridad.
La cosa no acaba aquí, pasamos a la "trastienda" y pudimos seguir sus explicaciones, porque entre otras cosas, da clases de acuarofilia, sobre el sistema de filtración que emplea y que se basa en el empleo de arena y azufre obteniedo un agua con nitritos 0.

No hay palabras para describir la cara que se nos puso cuando se dispuso a darnos una clase magistral sobre la tipología de los acuarios, su mantenimiento, el sistema de filtración y otros mil detalles que durante los siguientes 45 minutos pudimos ver a través de sus explicaciones y las diapositivas que había preparado. Pasamos al taller donde hace verdadero bricolaje acuarofílico y vimos cómo se las ingenia con materiales como los tubos de PVC empleados en desagües, la forma en que corta las esponjas que emplea en filtros y, en fin, esos pequeños trucos que cualquiera de nosotros liba como el más sabroso de los néctares.

Mil gracias Christian desde aquí por ese rato en tu compañía sintiéndonos alumnos y redescubriendo nuestra la capacidad de asombro.

Llegó la hora de la cena, nos tomamos un buen aperitivo como es costumbre, y principiamos la apertura de las ostras, manjar por el cual es también conocida esta bahía.

 

La cena fue extensa en viandas y en amigable charla, este primer día era mucho más de lo esperable y estábamos cansados y encantados.

Domingo, desperezamiento general, desayuno y a la Bahía a ver de qué va eso de las ostras.

¿Qué mejor lugar que un museo para tal fin?

No dejeis de visitarlo, es pequeñito y va al grano, nos cuenta el proceso de cultivo de las ostras desde que son larvas microscópicas hasta que llegan a nuestra mesa para deleite de comensales.

Tras visionar una película que hace un recorrido por la historia de la Bahía en relación al cultivo de las ostras y nos sitúa en el momento actual, una amable guía, hablando en castellano, resolvió nuestras dudas y nos fue preparando para comprender lo que veríamos fuera: la manera en que viven los ostricultores, sus cabañas, el sistema de trabajo, etc.

En estas imágenes se puede apreciar cómo la marea deja a la vista los fondos arenosos de manera que el ostricultor trabaja como si de un labriego se tratara plantando canastos de ostras a la espera de la crecida de la marea. A la derecha se puede ver una pequeña ostra de algo más de medio centímetro adherida a un disco de plástico.
Ver el mar, dejarse mecer por el vaivén de las embarcaciones repletas de ostras, los pájaros que se alimentaban entre el limo y un día soleado y claro nos abrieron el apetito, de modo que nos fiomos a este típico restaurante donde C2A agradeció a Marie Thérése y a Janine el esfuerzo que había realizado para hacer posible esta reunión, nos sumamos a este agradecimiento ya que el trabajo de estas estupendas personas fue nuestro placer.
Tras la opípara comida y para asegurar una buena digestión nos fuimos a dar un paseo por la Bahía de Arcachon en barco.
Pudimos acercarnos a los ostricultores y verlos faenar, observar esas dos casas que hoy en día ocupan guardas del parque natural y que estan elevadas sobre pilotes en el centro de la Bahía...
... echar una siesta para dar paz a nuestros cuerpos, otear el horizonte en busca de instatáneas insuperables, meterse con el vecino que incauto sonríe a la cámara ...
... vencer el miedo al agua y, en fin, ...
... relajarse en grupo o con el periódico y ver pasar maravillosas casa donde los franceses acomodados viven el verano.
Todo lo bueno se acaba, no queremos evitar caer en este tópico. El fin de semana fue uno de los mejores y más intensos que hemos vivido como personas y como miembros de Guppy 2000. La amistad, el buen rollo que se respiraba y la forma en que discurrió el viaje nos ha dejado un inmejorable sabor de boca que tardaremos mucho tiempo en olvidar.

Para colmo, Fred, presidente de C2A, nos obsequió con sendas botellas de otro producto típico de la zona y muy amado por nostros, uno de los vinos más famosos del mundo, ¡ahí es ná!.

No sé cuántas veces agradecí a cada uno/a y en grupo las atenciones con las que nos colmaron esos dos días, sigue siendo tema de conversación un mes más tarde y pone el listón muy alto ya que nos hace darnos cuenta las fronteras no existen y los amigos se merecen los mejor... un último agradecimiento desde esta tribuna a C2A y a las personas que estuvieron con nosotros.